▷➡️ Atrofia muscular ¿Qué es? Causas, síntomas y tratamiento

Atrofia muscular

La atrofia muscular no solo afecta físicamente, sino que también impacta de manera significativa en la autoestima de quienes la experimentan. Este trastorno conlleva el desgaste y la disminución del tejido muscular, lo que se traduce en una pérdida de fuerza y ​​capacidad funcional.

El desequilibrio entre la síntesis y la degradación de proteínas contribuye a este proceso, afectando las células nerviosas y provocando una parálisis progresiva. Esta condición no solo dificulta las actividades diarias básicas, sino que también puede tener un impacto emocional profundo en la vida de la persona afectada.

Índice
  1. ¿Qué sucede en el cuerpo?
  2. Causas
  3. Síntomas

¿Qué sucede en el cuerpo?

Tiene lugar una serie de procesos fisiológicos cuando se experimenta dolor y inflamación.

Este dolor puede resultar en una disminución de los impulsos nerviosos, lo que a su vez conduce a una inhibición en la función muscular.

La inflamación también puede provocar una reducción en el volumen muscular debido a la falta de actividad. Es importante comprender cómo estas condiciones afectan el cuerpo para abordar eficazmente cualquier problema relacionado.

Causas

Podemos distinguir entre fisiológica, patológica y neurogénica.

La atrofia fisiológica se refiere a la atrofia muscular causada por la falta de actividad, como resultado del desuso de ciertos músculos, como puede ser el caso de una vida sedentaria. Aquellas personas con limitaciones de movimiento debido a enfermedades o trabajos que requieren estar sentados por largos periodos tienen mayor probabilidad de desarrollar atrofia muscular.

Es importante destacar que en este tipo de atrofia, el tono muscular se pierde, pero en muchos casos, esta situación es reversible mediante rehabilitación, una alimentación adecuada y ejercicio.

Por otro lado, la atrofia patológica puede ser causada por diversas enfermedades o asociada al envejecimiento en personas de edad avanzada.

Finalmente, la atrofia neurogénica, la forma más grave de atrofia muscular, se produce como resultado de una enfermedad o lesión en los nervios que conectan los músculos. Puede manifestarse repentinamente y estar asociada a condiciones como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), lesiones en la médula espinal, síndrome de Guillain-Barré, entre otros. Además, factores como la desnutrición, el uso prolongado de corticoides, artritis y enfermedades musculares también pueden desencadenarla.

Es importante señalar que, en la población en general, los casos de atrofia muscular suelen estar relacionados con la inactividad cotidiana.

Síntomas

La atrofia muscular se manifiesta con la disminución de la fuerza y la movilidad, acompañada de una progresiva pérdida de tono muscular.

Este declive afecta la funcionalidad diaria y la autoestima de quien lo experimenta.

El tratamiento abarca diversas estrategias, desde la estimulación eléctrica funcional hasta terapias con aminoácidos para la regeneración muscular. Para casos más severos, se consideran opciones más agresivas.

La terapia ocupacional y fisioterapia desempeñan un papel crucial en la recuperación funcional del paciente, mediante ejercicios activos que estimulan las fibras musculares y promueven un estilo de vida activo.

Los pilares del tratamiento incluyen la prevención, estimulación y trabajo muscular progresivo, una alimentación adecuada y la integración de una vida activa.

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